Hoy, como no podría ser de otro modo, tenemos que hablar de deporte (y de tecnología), más en concreto de fútbol, ya que hoy da comienzo el Mundial de Brasil que, lejos de la polémica levantada alrededor del evento, va a intentar que las cosas salgan bien tanto fuera como dentro del campo. 

En casi todos los Mundiales hay polémica, goles que no suben habiendo entrado, y otros que sí lo hacen sin haber cruzado la línea de gol. Para ello se ha elegido a una compañía de ingenieros, la GoalControl, que garantizará que ninguna pelota cerca de la línea se declarare gol sin haberlo sido.

Esta tecnología de línea de gol lleva siendo usada desde hace años en deportes americanos. En el fútbol, su ingreso ha sido más lento. Siempre ha existido ese debate entre la gente a favor de obtener un resultado lo más justo posible, y otro grupo que prefiere dejar el azar como otra parte más del deporte, sin máquinas que “roboticen” el espectáculo. 

El sistema de control constará de 14 cámaras – siete para cada portería – que capturarán 500 fotogramas por segundo (el ojo humano sólo ve 16) y desde múltiples ángulos para seguir la trayectoria del balón con una precisión milimétrica. 

Pero esta tecnología no es nada barata. Hasta ahora, los estadios Americanos en los que ha sido introducida han gastado una media de 500.000$. Esto equivale a 10 millones en una liga de 20 equipos, por lo que no se usará (al menos por el momento) en ligas inferiores. 

¿Crees que está bien hacer uso de esta tecnología? ¿Merece la pena gastar este dinero,?

Fuente | New York Times