No cabe duda que la fuerza que impulsa la evolución empresarial es la tecnología. Fomentar la innovación y la mejora de procesos en las organizaciones para aportar valores añadidos hace que las empresas adopten nuevos enfoques hacia el aumento de productividad, mejores prácticas internas y una mayor atención al cliente.
Por tanto, el uso de la tecnología no es meramente una herramienta de uso diario, sino un elemento a incluir en la estrategia empresarial y ser conscientes de cómo la misma puede ser un elemento diferenciador.
ECM, (Enterprise Content Management) o gestión de contenidos empresariales unidos a la estrategia empresarial son capaces de facilitar una visión más profunda de la empresa, competidores, comportamiento del cliente, mejorar las áreas más deficientes, aumentar el trabajo en grupo…. El conjunto de las herramientas relacionadas con ECM, es decir, todas aquellas tecnologías utilizadas para capturar, gestionar, guardar, entregar y conservar la información que sustenta los procesos de negocio, dotan a las organizaciones de los instrumentos necesarios para poner en práctica este tipo de servicios de manera escalable centrando los procesos de negocio en la automatización generando respuestas rápidas a las cuestiones planteadas.
Otro de los puntos fundamentales del uso de herramientas ECM es la reducción de costes y la optimizacion. Los servicios innovadores, tales como la automatización de procesos y la gestión de volúmenes de datos ágilmente están permitiendo a las empresas operar de manera más rentable, facilitando la apertura o mejora de otros departamentos.
La tecnología y la innovación en consonancia con la previsión y visión, independientemente del sector y del área de enfoque, proporciona nuevas ideas y planteamientos a las cuestiones de las empresas convirtiéndose en el motor de la evolución empresarial.