Si bien se trata de una adicción relativamente nueva: la adicción a la tecnología no reconoce períodos ni épocas en el año. «Cuando mis pacientes deciden emprender un viaje solos, con amigos o en familia, mi recomendación es que se alejen de los teléfonos móviles, ya que tienen mail, Whatsapp, archivos, entre otros, que lo único que hacen es hacer más dependientes a las personas de sus trabajos a la lejanía», asegura Cynthia Zaiats, neuropsicóloga especialista en adolescentes y adultos.
Mucho más que una conducta
Aunque actualmente muchos consideren al dispositivo electrónico como una extensión de su cuerpo y lo asuman de forma natural, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que una de cada cuatro personas sufre trastornos de conducta vinculados con las nuevas tecnologías.
«La idea de que se tomen unos días es que puedan despejarse, ya que nunca cortan con la rutina. Lo que sucede también es que la persona se encuentra con el reclamo de la familia y se dan cuenta que necesitan ayuda para que se desconecten», enfatizó la especialista.
En este contexto, la profesional enumeró una serie de consecuencias del uso desmedido de la tecnología en vacaciones:
-Se desconectan de la familia, de la sociedad y el ambiente
-El estrés trae aparejado consecuencias muy grandes, porque lleva a otros problemas de salud
-Problemas familiares
-Conflictos con el entorno